El canciller ruso Molotov y su igual nazi Von Ribbentrop rubricando el Pacto
Un acuerdo internacional que no fue suficientemente dado a publicidad, en el transcurrir de los años, posiblemente debido a cuestiones de alta política, es el denominado "Pacto Molotov - Von Ribbentropp". En ocasión de rubricarse el mismo, el 23 de agosto de 1939, se actuó en el mayor de los secretos. Los eventos que transcurrieron luego de la rúbrica, dieron la razón a quienes pretendían que no existiera publicidad sobre este acto. En efecto, sorprendió a tirios y troyanos por cuanto hasta los acérrimos y radicalizados partidarios del último gobierno republicano, en España, quien recibió total apoyo, militar e ideológico, de la Unión Soviética, se sintieron traicionados por Stalin. Por su parte, la actitud de Hitler, fue la causa de que al invadir Francia los alemanes, se procediera a clausurar todos los diarios con excepción del vocero del partido comunista. El gobierno de Petain, cambió su actitud ante la llegada de personajes republicanos a territorio francés. Antaño, los gobiernos izquierdistas de Francia, recibieron con simpatía a los vencidos republicanos, en su gran mayoría de izquierda radicalizada.
Al poco tiempo de ser invadida Polonia por los alemanes, los rusos invadieron territorio polaco. Los demás países, partidarios del Eje o de los aliados, no dieron a publicidad ninguna protesta ni hicieron mención al acuerdo entre esas potencias. El silencio tuvo consecuencias funestas para todos. Señala el diario ABC del 23 de agosto de 2014: “Un día como hoy de 1939, los ministros de Asuntos Exteriores
de Alemania y la URSS firmaron un acuerdo por el que se prometían no formar
parte de alguna alianza política o militar contraria al otro. El entendimiento
les duró año y medio.
Las relaciones diplomáticas crean en ocasiones extraños
compañeros de cama. La historia está llena de enemigos íntimos y acuerdos a
contranatura, pero pocos fueron tan llamativos como el Pacto
Ribbentrop-Molotov. Aquel 23 de agosto de 1939 –un
día como hoy de hace 75 años– Alemania
y la Unión Soviética se prometieron lealtad y el reparto de una serie de territorios en Europa
Oriental."
"El acuerdo se rubricó en Moscú,
y adquirió el nombre de los dos ministros firmantes: el alemán Joachim von Ribbentrop y
el soviético Viacheslav Molotov. En aquella reunión celebrada en el Kremlin
participó un sonriente Iósif Stalin, que departió amistosamente
con el emisario del III Reich. En consecuencia, muchos fascistas europeos
–definidos desde hace años enemigos del comunismo ruso– se mostraron contrarios
al acuerdo.
El pacto
de no agresión contaba con siete cláusulas
públicas y cuatro secretas que se conocieron años
más tarde. De
puertas para afuera, Alemania y Rusia establecían en su artículo IV que
«ninguna de las dos participarán en agrupaciones de potencias que de alguna
forma estén dirigidas directa o indirectamente contra la otra parte».
De puertas
para adentro, Alemania y la URSS establecieron
una serie de «áreas de influencia». Un reparto futuro de Europa Oriental que empezaría por Polonia, a la que invadieron solo unos días después. Una vez terminada la guerra las
cláusulas secretas fueron descubiertas por el ejército británico, que las puso en conocimiento de la opinión pública.
Aun
siendo una de las vencedoras del conflicto, la Unión
Soviética negó durante décadas la existencia de
dichas cláusulas. No fue hasta agosto
de 1989 –cincuenta años después de la firma
del acuerdo– cuando el gobierno soviético
presidido por Gorbachov reconoció que esos
artículos ocultos planificaban el «reparto» nazi-soviético de Europa Oriental.
Hitler
aceptó el pacto, pese a que ya habló en «Mein Kampf» de invadir Rusia. Según el artículo VI, el acuerdo expiraba «en un
período de diez años, con la previsión que, en cuanto alguna de las Altas Partes Contratantes no lo denuncie un año antes a la
expiración de ese período, la validez del tratado será extendido por otros
cinco años». Se
prometieron una década de lealtad que saltó
por los aires en apenas año y medio con el
comienzo –en junio de 1941– de la Operación Barbarroja. No obstante,
estaban avisados: Hitler ya mencionó en Mein Kampf su
deseo de expandir el Reich por la Unión Soviética.
Los
ministros de Asuntos Exteriores que dieron nombre al pacto
de no agresión tuvieron a partir de
entonces trayectorias muy distintas. El diplomático ruso Viacheslav Molotov permaneció como
Vicepresidente del Consejo de Ministros de la URSS hasta el año 1957, cuando
Nikita Jrushchov decidió prescindir de él. Se retiró de forma definitiva en
1961 y falleció en 1986, a la edad de 96 años.
Peor suerte
corrió el ministro de Asuntos Exteriores alemán Joachim von Ribbentrop, al que después del conflicto acusaron de crímenes de guerra y genocidio. Las potencias vencedoras demostraron que había jugado un papel principal en la deportación de los judíos. Su trabajo consistió
en persuadir a países limítrofes (satélites) para que asumieran esa población que después iba a ser
exterminada. Por ello decidieron
condenarlo a la horca, donde murió el 16 de octubre de 1946.
Señala el Pacto, en su parte pertinente: "Deseosos de fortalecer la causa de la paz entre Alemania y la
URSS, y procediendo con las previsiones fundamentales del Acuerdo de
Neutralidad firmado en abril de 1926 entre Alemania y la URSS, han llegado al
siguiente acuerdo:
– Artículo I: Ambas Altas Partes Contratantes se obligan a
desistir de cualquier acto de violencia, cualquier acción agresiva, y cualquier
ataque a la otra parte, ya sea individual o en conjunto con otras potencias.
– Artículo II: Si cualquiera de las partes fuera objeto de
una acción beligerante por una tercera potencia, la otra Alta Parte Contratante
de ninguna manera deberá dar apoyo a esa tercera potencia.
– Artículo III: Los Gobiernos de las dos Altas
Partes Contratantes deberán mantener en el futuro contacto continuo, con el
propósito de intercambiar información.
– Artículo IV: Ninguna de las dos Altas Partes contratantes
deberán participar en agrupaciones de potencias, que de alguna forma estén
dirigidas directa o indirectamente contra la otra parte.
– Artículo V: En caso de surgir algún conflicto entre las
Altas Partes Contratantes sobre problemas de cualquier tipo, ambas partes
deberán resolver las disputas o conflictos exclusivamente a través de
intercambios amistosos de opinión o, si fuera necesario, por medio del
establecimiento de comisiones de arbitraje.
– Artículo VI: El presente tratado concluirá en un período de
diez años, con la previsión que, en cuanto alguna de las Altas Partes
Contratantes no lo denuncie un año antes a la expiración de ese período, la
validez del tratado será extendido por otros cinco años.
– Artículo VII: El presente tratado deberá ser ratificado
dentro del más corto tiempo posible. Las ratificaciones serán intercambiadas en
Berlín. El acuerdo entrará en vigor tan pronto como sea firmado.
Protocolo Secreto Adicional
1. – En el caso de un reacondicionamiento territorial y
político en las áreas pertenecientes a los Estados Bálticos (Finlandia,
Estonia, Latvia Lituania), la frontera norte de Lituania representarán los
límites de la esfera de influencia de Alemania y de la URSS. En relación con
esto, el interés de Lituania en el área del Vilna es reconocida por cada parte.
2.– En el
caso de un reacondicionamiento territorial y político en las áreas pertenecientes al Estado Polaco, las esferas de influencia de
Alemania y la URSS, serán limitadas por la
línea de los ríos Narew, Vístula y San. La cuestión de que si ambas partes ven como conveniente el
mantenimiento de un Estado polaco y cómo ese Estado deberá limitar de alguna
forma, esa limitación puede solamente ser determinada en el curso de los
próximos desenvolvimientos políticos.En
cualquier caso, ambos Gobiernos resolverán esa cuestión por medio de un acuerdo
amistoso.
3. – En relación con el Sureste Europeo, la parte Soviética
llama la atención sobre su interés en Besarabia. La parte alemana declara su
completo desinterés político en esas áreas.
4. – Este
protocolo deberá ser tratado por ambas partes en estricto secreto.” .
No hay comentarios:
Publicar un comentario